En una entrevista durante Vanity Fair’s New Establishment conference, el jefe de diseño, Jony Ive, habló sobre las tres lecciones más importantes que Jobs le enseñó durante su tiempo juntos en Apple. No sorprende que todas ellas estén relacionadas con la impresionante habilidad que tenía Jobs para concentrarse. Y nos referimos a realmente concentrarse.
1. Siempre tener claro en qué me estoy concentrando
“Foco” es una palabra muy interesante para describir la motivación de Jobs. Para casi todos, esta palabra se refiere a lo que queremos lograr en este preciso instante, pero para Jobs era una obsesión a largo plazo. “Steve era la persona más centrada que he conocido en mi vida. Y el tema con la concentración es que no es algo que se decide un día de la nada. Es algo que se trabaja minuto a minuto. Puedes conseguir muchas cosas si es que realmente te concentras”, cuenta Ive.
2. Haz sacrificios que importen
Es fácil decirle que no a las ideas que son malas. Pero decirle que no a ideas buenas que no se alinean con tus objetivos es otra cosa. Pero para mantener el foco, eso es exactamente lo que necesitamos hacer. “Steve siempre me preguntaba ‘¿A qué cosas les has dicho que no?’ Y yo le respondía ‘a tal, tal y tal cosa’, pero él sabía que no estaba ni remotamente interesado en esas ideas, así que no había sacrificio real”, contó Ive.
Mantener el foco significa decir no a cosas que sabes que son excelentes ideas y que te levantes pensando en ellas, pero terminas diciendo que no porque estás concentrado en algo más.
3. No dejes que la vanidad se interponga en tu camino
Concentrarse en una meta en particular es especialmente difícil cuando estás trabajando en equipo. No se trata sólo de mantener disciplina, sino que también se trata de involucrar a tu equipo en la misma filosofía de trabajo. ¿Cómo mantienes el trabajo a un nivel aceptable para ti y al mismo tiempo mantienes alta la moral del equipo?
Según Jobs, no se trata de endulzar la realidad. Famoso por su perfeccionismo, para Jobs la forma en la que era percibido por los demás importaba menos que alcanzar sus objetivos.
“Estaba teniendo una conversación con él y recuerdo haberle preguntado por qué fue tan duro con una crítica que nos hizo con cierto producto. Pusimos todo de nosotros en él ¿No podría haber sido un poco más moderado con todo lo que nos dijo? A lo que me respondió: ‘Bueno ¿Y por qué?’ Y yo le dije: ‘Bueno, porque yo me preocupo del equipo’. A esto el me dio una respuesta brillante: ‘No Jony, sólo estás siendo vanidoso. Quieres gustarle al resto y estoy sorprendido porque pensé que realmente tenías el trabajo como tu prioridad número uno, no pensé que te importara la forma en la que te perciben los demás’. Y me dejó en un dilema, porque sabía que estaba en lo correcto”, cuenta Ive.
Es fascinante ver cómo la mirada de Jobs sobre la concentración impactó la reputación y los productos de Apple. Y si el éxito de la compañía es un indicador, entonces por lo menos vale la pena tratar de entender sus métodos.
La próxima vez que digas que te estás “concentrando”, piensa en lo que realmente significa esta palabra y pregúntate si es que estás listo para hacer sacrificios de verdad. Quizás te sorprendas del resultado.
Fuente: www.reqlut.com
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